Domingo 5 de Julio, 9 de la mañana, desayunando en la mesa, afuera nubes por doquier. Julio significa que ya pasó la mitad del año, y que hace 8 meses que pisamos México con las valijas y las gatas en la mano. Parece mentira, que ya se haya ido la mitad del año, y 3/4s del primer año en México. Abstractamente, un año parece a veces una eternidad, y sin embargo pasa tan rápido!
Esta semana arrancamos con grabación, y los lunes no está bueno empezar con días tan intensos, porque el resto de la semana se hace larga y cuesta arriba... más si estás empezando a sentir que estás por enfermarte. Y con seguridad, llegó la gripa, y no por eso el trabajo me dejó descansar, ni en la cama ni en el sillón. El único "dia de enferma" que me tomé, me la pasé de call en presentación y feedback de cortes con la productora. Por suerte, con Next, Vick, y Nafrin, el sufrimiento dura menos y hoy ya estoy casi curada...
Nuestras búsquedas inmobiliarias y de carrocería han quedado suspendidas por el momento, porque nos rechazaron el crédito para el auto, y creemos necesitar un agente inmobiliario para ayudarnos a entender cómo todo el mundo dice que podemos conseguir algo mejor y más grande en Condesa o la Roma porque Polanco es carísimo, y sin embargo nosotros nos frustramos ante la oferta departamentaria.
A pesar de que ninguna concesionaria parece concedernos la oportunidad de tener auto propio, nos hicimos socios de Carrot (un sistema tipo Zipcar donde rentas autos por hora y lo dejas estacionado en lugares asignados, aunque no lo estrenamos todavía porque para sacar el registro en DF vas al supermercado, para hacerte socio de Carrot de piden hasta el último recibo de la farmacia). Mejor que eso, el fin de semana tenemos camioneta prestada nuevamente, aunque cambiamos de modelo y ahora nos movemos en Q5, vamos de un extremo a otro. De andar a pata a andar en Audi... pobres nosotros, no?
Ayer aprovechamos el auto para pasear por Coyoacán, recorrer las callecitas comiendo churros con chocolate, comprar libros de budismo y meditación, chusmear vinilos y peluquerías, y volver a tiempo para comer unas quesadillas mirando un capítulo de Vikings -la nueva adicción de turno- antes de que arrancara la final de la copa America en el sillón, que por supuesto yo no vi y en cambio me dediqué a cocinar una quiche de hongos cuyo video estará disponible mañana en youtube. A la noche fuimos al teatro a ver Una Noche en la Playa, una intepretación de una obra española, que cuando vimos el teatro estilo colegio secundaria de barrio, temimos fuese a ser un fracaso, y sin embargo resultó muy divertida. Les diría que se les recomiendo pero la temporada termina en dos semanas, y sólamente acá en México jeje. Hoy teníamos ganas de ir a Tepoztlán (un pueblo mágico que queda como a media hora de acá), pero hay resfríos y dolores de espalda, así que vamos a ver si aguanta la cintura.
Mañana a la tarde viajo a Medellín (sellito nuevo para el pasaporte - aunque no creo que pueda decir que conoceré realmente Medellín, ya que tras dos jornadas de rodaje estaré nuevamente en el avión de regreso a DF Jueves), y el Viernes madrugamos para irnos a pasar un fin de semana largo en Houston, Texas con los papos. Shopping, half price books, hamburguesas de Red Robin y música. Y pensar que yo dije que este 2015 venía poco viajado, no?
Me reporto la semana que viene desde la cocina de The Woodlands. Besos, abrazos y muy buena semana :)
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